La economía bimonetaria que anunció Javier Milei comenzaría a funcionar en el primer trimestre del próximo año. Ante el impulso oficial, el sistema financiero trabaja para permitirles a los argentinos pagar en dólares usando tarjeta de débito y que los billetes estadounidenses comiencen a girar dentro del circuito formal de la economía.
En la cadena nacional por el primer año de su Gobierno, Milei volvió a poner sobre la mesa este tema. “Todos los argentinos podrán utilizar la moneda que quieran en sus transacciones cotidianas«, aseguró el mandatario y detalló: “Para avanzar en el proceso del cierre del Banco Central que hemos prometido y que terminará con la inflación para siempre en Argentina, hemos anunciado un esquema de competencia de monedas”
“Esto quiere decir que desde ahora cada argentino va a poder comprar, vender y facturar en dólares o la moneda en que consideren, exceptuando el pago de impuestos que por ahora seguirá siendo en pesos», aclaró el presidente. De esta manera, marcó la cancha con un tema que ya había adelantado Luis Caputo meses atrás: la incorporación de tarjetas de débito en dólares desde donde los clientes podrán abonar sus consumos. Caputo lo había anticipado en el marco del blanqueo pero ahora la intención es que esto esté disponible para toda la economía.
Para avanzar en el monetarismo hacen faltas algunos ajustes normativos. Por ejemplo que los precios de los bienes y los servicios puedan detallarse en ambas monedas en las góndolas y los mostradores. En eso está trabajando la Secretaría de Comercio, que en las próximas horas presentaría una nueva resolución en la que se establecerá que los comercios deben exhibir los precios tanto en pesos como en dólares. Para esto, la cartera en la que recientemente asumió Esteban Marzottati, deberá derogar una normativa que rige desde 2002.
En una primera instancia se espera que estas modificaciones lleguen a los rubros más expuestos a «gastos dolarizados» como pueden ser las casas de electrodomésticos, las concesionarias de autos o las agencias de viaje. Pero la expectativa oficial es que esto se extienda hasta otros segmentos de la economía.
Esta resolución podría ser el puntapié inicial para la puesta en marcha de la economía bimonetaria. Desde ARCA le confirmaron a Clarín que actualmente los comercios ya pueden facturar en dólares y desde el Banco Central especificaron que no hace falta ninguna norma adicional para que los pagos con tarjetas de débito en dólares puedan implementarse. En el marco del blanqueo, el organismo le había pedido a los bancos que les habilite a los titulares de las cuentas CERA una tarjeta de débito asociada.
En el sector recordaron que los pagos dentro de la economía doméstica en dólares sólo podrán hacerse con tarjeta de débito, ya que en la Argentina no está habilitado el crédito en moneda extranjera para individuos.
Con la pelota del lado del sector privado, en las marcas de tarjetas aseguran que «está todo listo» para comenzar a operar. Por un lado, fuentes de VISA dijeron: «Estamos listos desde septiembre de este año y ahora lo que están definiendo son los adquirentes y los bancos y los emisores son los que tienen que cerrarlo». En la misma línea, en Mastercard afirmaron: «Tenemos la solución lista, solo resta que el ecosistema termine las adecuaciones necesarias para implementarla y que las personas puedan hacer pagos en pesos y dólares en el país con sus tarjetas de débito. Este sistema debería estar funcionando en comercios durante los primeros meses del año»
«En una primera instancia se habilitará la operatoria para Débito. Para extender la operatoria a Crédito y Prepago, Mastercard también se encuentra listo, pero todavía se requieren cambios en el marco normativo vigente», recordaron en la compañía. Los bancos consultados por Clarín también confirmaron que trabajan en el tema y que solo faltan algunos ajustes dentro del ecosistema financiero. La semana pasada, en un evento empresarial, Martín Kaplan, CEO de Prisma y de Payway aseguró que estos pagos bimonetarios estarán disponibles en los primeros tres meses del próximo año.