Un aparente gesto solidario de un amigo que va en ayuda de otro que había chocado terminó con uno de ellos detenido, un arma secuestrada y la revelación de que los dos automóviles que utilizaban eran robados. El insólito incidente ocurrió este martes en la ciudad de Mar del Plata, donde la Policía bonaerense y la justicia local tomaron intervención en el caso.
Según lo informado por la policía local, el joven de 21 años que manejaba un Renault Sandero colorado chocó contra un árbol en la zona de Parque Hermoso y como tenía que cumplir un viaje como remisero llamó a un colega para que le llevara otro de los vehículos que utilizaba para trabajar, un Volkswagen Gol verde.
Ante el alerta automática por el accidente, una patrulla policial se acercó al lugar y cuando los agentes se aproximaron para auxiliar a los automovilistas, los dos jóvenes escaparon a las corridas por lo que comenzaron a perseguirlos.
El choque se produjo en la zona del parque, entre las calles Catriel y San Cayetano, donde el Renault rojo impactó de frente contra un árbol.
Tras la persecución que se inició cuando los agentes no pudieron identificar a los conductores, personal del Gabinete Técnico Operativo de la subcomisaría local lograron arrestar al muchacho de 21 años a las pocas cuadras quien les dijo que «trabajaba como remisero» y que los dos coches eran suyos.
Ante ello, los agentes buscaron corroborar el dato y el sistema informático detectó que los dos vehículos tenían pedidos de secuestro activos desde enero por haber sido robados.
Además, la policía corroboró que los dos autos tenían las chapas patentes adulteradas.
En el caso intervino la fiscal María Isabel Sánchez, quien al pedir la requisa del automóvil chocado logró detectar que había un revolver calibre 38 largo, con 4 municiones en su interior.
La fiscal ordenó entonces el traslado del joven de 21 años a la Unidad Penal de Batán.